jueves, 24 de junio de 2010

16.

No es obligación de uno entender a los demás. Cada individuo tiene sus prioridades, sus pensamientos, opiniones y puede hacer lo que se le pega la regalada gana con su vida.
Eso, mientras no afecte la libertad de otros.

Aunque a veces esos puntos me desesperen porque no le encuentro lógica ya que es algo muy volado y muy superficial (en todo el sentido de la palabra)como para que "sentimientos" extremos afloren.

Aunque a veces... me gustaría saber el por qué de todo. y a quién no? Pero somos simples humanos. Sin embargo, yo soy especial (H), está bien...

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